Villena

Villena

Se trata de un linaje muy antiguo y de acreditada nobleza de Castilla, que ya poseía notables casas solares en Ávila en el siglo XVI, así como en la ciudad de Salamanca y el lugar de Cuellar, en la provincia de Segovia. Este linaje participó activamente en la Reconquista de Andalucía donde varios de sus miembros establecieron casas. También en América, se encontraron los Villena desde los primeros tiempos de su descubrimiento y conquista. En el año 1.760, el rey Carlos III concedió el título de Marqués del Real Tesoro a don Joaquín Manuel de Villena. De la antigüedad de este linaje bastará un solo ejemplo: sor Isabel de Villena, nacida en Valencia en el año 1.430. Fue una escritora española en lengua catalana. Era hija natural de Enrique de Villena (nacido en el año 1.384), también escritor que pertenecía por la línea paterna a la casa de Aragón y por línea materna bastarda a la de Castilla. Huérfano a los pocos años, su tío don Enrique II se encargó de su educación. Es una figura que está envuelta en la leyenda ya que en su época fue tenido por mago dada su afición a la astrología y la alquimia. La mayoría de sus obras las escribió en catalán pero las tradujo al castellano él mismo. Su hija, la anteriormente citada sor Isabel de Villena se educó en la corte de María de Castilla, esposa de Alfonso V "el Magnánimo". Fue abadesa del Convento de la Santísima Trinidad de Valencia hasta su muerte. Dejó un solo libro, "Vita Christi", donde, con lenguaje sencillo, narra la vida de Cristo entremezclando citas clásicas y alegóricas. El Marquesado de Villena fue concedido por Enrique II de Castilla en 1.366 a Alfonso I de Gandía, Conde de Ribagorza y de Denia, primer Duque de Gandía y Condestable de Castilla. Este personaje se lo cedió a su hijo Pedro de Villena, pero en 1.391, el rey de Castilla se lo confiscó y revertió a la Corona. Concedido de nuevo, en 1.420, a Enrique, Infante de Aragón, por Juan II, fue otra vez confiscado en 1.445, después de la batalla de Olmedo. Convertido en Marquesado se le otorgó a don Juan Pacheco, Marqués de Villena, Maestre de Santiago y Adelantado Mayor de Castilla. Posteriormente pasó a los Fernández de Velasco, a los Téllez Girón y a los Martorell.

ARMAS:

En campo de sinople, un león de púrpura rampante.

Villena

Se trata de un linaje muy antiguo y de acreditada nobleza de Castilla, que ya poseía notables casas solares en Ávila en el siglo XVI, así como en la ciudad de Salamanca y el lugar de Cuellar, en la provincia de Segovia. Este linaje participó activamente en la Reconquista de Andalucía donde varios de sus miembros establecieron casas. También en América, se encontraron los Villena desde los primeros tiempos de su descubrimiento y conquista. En el año 1.760, el rey Carlos III concedió el título de Marqués del Real Tesoro a don Joaquín Manuel de Villena. De la antigüedad de este linaje bastará un solo ejemplo: sor Isabel de Villena, nacida en Valencia en el año 1.430. Fue una escritora española en lengua catalana. Era hija natural de Enrique de Villena (nacido en el año 1.384), también escritor que pertenecía por la línea paterna a la casa de Aragón y por línea materna bastarda a la de Castilla. Huérfano a los pocos años, su tío don Enrique II se encargó de su educación. Es una figura que está envuelta en la leyenda ya que en su época fue tenido por mago dada su afición a la astrología y la alquimia. La mayoría de sus obras las escribió en catalán pero las tradujo al castellano él mismo. Su hija, la anteriormente citada sor Isabel de Villena se educó en la corte de María de Castilla, esposa de Alfonso V "el Magnánimo". Fue abadesa del Convento de la Santísima Trinidad de Valencia hasta su muerte. Dejó un solo libro, "Vita Christi", donde, con lenguaje sencillo, narra la vida de Cristo entremezclando citas clásicas y alegóricas. El Marquesado de Villena fue concedido por Enrique II de Castilla en 1.366 a Alfonso I de Gandía, Conde de Ribagorza y de Denia, primer Duque de Gandía y Condestable de Castilla. Este personaje se lo cedió a su hijo Pedro de Villena, pero en 1.391, el rey de Castilla se lo confiscó y revertió a la Corona. Concedido de nuevo, en 1.420, a Enrique, Infante de Aragón, por Juan II, fue otra vez confiscado en 1.445, después de la batalla de Olmedo. Convertido en Marquesado se le otorgó a don Juan Pacheco, Marqués de Villena, Maestre de Santiago y Adelantado Mayor de Castilla. Posteriormente pasó a los Fernández de Velasco, a los Téllez Girón y a los Martorell.

ARMAS:

En campo de sinople, un león de púrpura rampante.