Guijarro

Guijarro

Apellido castellano, muy extendido por las provincias de Madrid, Toledo, Ciudad Real, Cuenca y Valladolid, con antiguos solares en Albacete y líneas que pasaron a América. Su nobleza queda avalada por una certificación de armas dada en favor del licenciado don Francisco García Guijarro el 15 de abril de 1.750 por don Juan Alfonso de Guerra, Cronista y Rey de Armas de Fernando VI, donde se expone el origen del apellido. Su procedencia castellana queda demostrada por las numerosas probanzas de limpieza de sangre e hidalguía que se efectuaron ante las Reales Chancillerías. Allí se ve como la casi totalidad de ellas proceden de Madrid y las provincias que citamos al principio. El Gentilhombre de Cámara de S.M. y Alguacil Mayor en el Real y Supremo de Castilla, Don Agustín Rodríguez de los Ríos Bueno y Guijarro ingresó en la Orden de Santiago en el año 1.717. Por el apellido Guijarro, el caballero antes citado era nieto materno de don Juan Bueno Guijarro, natural de Barajas (Madrid) donde había nacido en el año 1.605, que fue Familiar del Santo Oficio y Alcalde por la Hermandad del Estado Noble. Ante los diferentes Colegios Mayores que componían la Universidad de Alcalá de Henares llevaron a cabo informaciones para que se comprobara la limpieza de su sangre muchos miembros del apellido Guijarro y poder así realizar estudios en los citados centros. Y la inmensa mayoría de estos expedientes correspondan a los nacidos en Madrid, Cuenca y Guadalajara, por una Real Cédula despachada en Aranjuez por don Carlos IV, se otorgó la Nobleza de Privilegio relevada del derecho de lanzas y medidas innatas, a don Juan Guijarro y Espinosa, vecino de la ciudad de Alicante (esta es una de las excepciones de las que hablamos con anterioridad) y asentista de paja para el ejército de Cataluña. De los Guijarro que pasaron al Nuevo Mundo cabe citar a don Manuel Guijarro, que fue nombrado Caballero Castellano del Castillo de San Carlos en Maracaibo (Venezuela) por Real Cédula de 11 de mayo de 1.716.

ARMAS:

En plata, una cruz flordelisada de oro.

Guijarro

Apellido castellano, muy extendido por las provincias de Madrid, Toledo, Ciudad Real, Cuenca y Valladolid, con antiguos solares en Albacete y líneas que pasaron a América. Su nobleza queda avalada por una certificación de armas dada en favor del licenciado don Francisco García Guijarro el 15 de abril de 1.750 por don Juan Alfonso de Guerra, Cronista y Rey de Armas de Fernando VI, donde se expone el origen del apellido. Su procedencia castellana queda demostrada por las numerosas probanzas de limpieza de sangre e hidalguía que se efectuaron ante las Reales Chancillerías. Allí se ve como la casi totalidad de ellas proceden de Madrid y las provincias que citamos al principio. El Gentilhombre de Cámara de S.M. y Alguacil Mayor en el Real y Supremo de Castilla, Don Agustín Rodríguez de los Ríos Bueno y Guijarro ingresó en la Orden de Santiago en el año 1.717. Por el apellido Guijarro, el caballero antes citado era nieto materno de don Juan Bueno Guijarro, natural de Barajas (Madrid) donde había nacido en el año 1.605, que fue Familiar del Santo Oficio y Alcalde por la Hermandad del Estado Noble. Ante los diferentes Colegios Mayores que componían la Universidad de Alcalá de Henares llevaron a cabo informaciones para que se comprobara la limpieza de su sangre muchos miembros del apellido Guijarro y poder así realizar estudios en los citados centros. Y la inmensa mayoría de estos expedientes correspondan a los nacidos en Madrid, Cuenca y Guadalajara, por una Real Cédula despachada en Aranjuez por don Carlos IV, se otorgó la Nobleza de Privilegio relevada del derecho de lanzas y medidas innatas, a don Juan Guijarro y Espinosa, vecino de la ciudad de Alicante (esta es una de las excepciones de las que hablamos con anterioridad) y asentista de paja para el ejército de Cataluña. De los Guijarro que pasaron al Nuevo Mundo cabe citar a don Manuel Guijarro, que fue nombrado Caballero Castellano del Castillo de San Carlos en Maracaibo (Venezuela) por Real Cédula de 11 de mayo de 1.716.

ARMAS:

En plata, una cruz flordelisada de oro.