Espejo
El origen de este noble linaje hay que fijarlo en el reino de Aragón, donde se distinguieron numerosos caballeros del apellido Espejo, en particular Alvarez del Espejo, que fue embajador del rey don Jaime II, ante el rey don Alonso de Portugal, llevando a cabo su misión con tanto tacto y prudencia que mereció la felicitación de su rey. Alvar Nuñez del Espejo, que hizo donación del castillo de Cañete al rey don Pedro IV, de Aragón; Remir Alvarez del Espejo pasó a Murcia, donde estableció casa solar y familia; Gonzalo Ruiz del Espejo, descendiente del anterior caballero hizo las debidas probanzas para que le fuera reconocida su calidad de hijodalgo, como así le fue reconocida. Armas: Escudo de gules, tres espejos redondos y en el centro del escudo una cruz llana de oro.