Bernal

Bernal

He aquí una serie de apellidos a los que todos los genealogistas, sin ninguna excepción que sepamos, consideran como derivados del francés Barnard: Bernad, Bernades, Baernales, Baernald, Barnerdo y Bernal; Ahora bien, este nombre siempre fue muy generalizado en la vecina Francia, lo que hace suponer que quizás seria erróneo asignar un mismo tronco y familia a cuantos ostentan estos apellidos. En España, tenemos el apellido Bernal que es murciano y tiene reconocido como su tronco a Ramón Bernal, Señor de Castelnovo, que asistió a la coronación del rey de Navarra Carlos III. Parece ser que este caballero se estableció en Murcia donde dejó descendencia que ha ido perpetuando el apellido.

Pero existe un hecho imposible de obviar, y es que Bernal, como nombre se utilizó muchísimo en Castilla, y basta citar un solo ejemplo: el del capitán y cronista español, Bernal Díaz del Castillo, nacido en Medina del Campo en 1.406 y muerto en Guatemala en 1.554. Este hombre tomó parte en numerosas conquistas españolas en el Nuevo Mundo y participó con Hernán Cortés en las batallas que condujeron a la dominación del territorio de los aztecas, hoy Méjico. Y como nombre lo dejaron los españoles en dicho país: en el siglo pasado floreció en Méjico cierto guerrillero así llamado. Y también quedó en el Nuevo Mundo como apellido, porque sin abandonar Méjico, encontramos a Meraclio Bernal, un célebre bandolero mejicano que se apodaba "El Rayo de Sinaloa" que si bien en su primeros tiempos fue un combatiente que luchaba junto a Benito Juares para expulsar de su país a los invasores franceses, acabó convertido en un bandolero dedicado a asaltar minas de propiedad extranjera. Como se ofrecieron diez pesos por su captura o muerte, acabó asesinado por algunos de sus secuaces, ávidos de cobrar la recompensa. Con la expedición de Hernando de Soto iba Bernal Sánchez, lo que demuestra que en la época de la conquista americana, se utilizaba bien como apellido, bien como nombre.

ARMAS:

Escudo de oro, partido en mantel; en el 1º un roque de gules. En el 2º esta señal T del mismo color; en la punta un lebrel de plata. Bordura del mismo metal y quince banderas.

Bernal

He aquí una serie de apellidos a los que todos los genealogistas, sin ninguna excepción que sepamos, consideran como derivados del francés Barnard: Bernad, Bernades, Baernales, Baernald, Barnerdo y Bernal; Ahora bien, este nombre siempre fue muy generalizado en la vecina Francia, lo que hace suponer que quizás seria erróneo asignar un mismo tronco y familia a cuantos ostentan estos apellidos. En España, tenemos el apellido Bernal que es murciano y tiene reconocido como su tronco a Ramón Bernal, Señor de Castelnovo, que asistió a la coronación del rey de Navarra Carlos III. Parece ser que este caballero se estableció en Murcia donde dejó descendencia que ha ido perpetuando el apellido.

Pero existe un hecho imposible de obviar, y es que Bernal, como nombre se utilizó muchísimo en Castilla, y basta citar un solo ejemplo: el del capitán y cronista español, Bernal Díaz del Castillo, nacido en Medina del Campo en 1.406 y muerto en Guatemala en 1.554. Este hombre tomó parte en numerosas conquistas españolas en el Nuevo Mundo y participó con Hernán Cortés en las batallas que condujeron a la dominación del territorio de los aztecas, hoy Méjico. Y como nombre lo dejaron los españoles en dicho país: en el siglo pasado floreció en Méjico cierto guerrillero así llamado. Y también quedó en el Nuevo Mundo como apellido, porque sin abandonar Méjico, encontramos a Meraclio Bernal, un célebre bandolero mejicano que se apodaba "El Rayo de Sinaloa" que si bien en su primeros tiempos fue un combatiente que luchaba junto a Benito Juares para expulsar de su país a los invasores franceses, acabó convertido en un bandolero dedicado a asaltar minas de propiedad extranjera. Como se ofrecieron diez pesos por su captura o muerte, acabó asesinado por algunos de sus secuaces, ávidos de cobrar la recompensa. Con la expedición de Hernando de Soto iba Bernal Sánchez, lo que demuestra que en la época de la conquista americana, se utilizaba bien como apellido, bien como nombre.

ARMAS:

Escudo de oro, partido en mantel; en el 1º un roque de gules. En el 2º esta señal T del mismo color; en la punta un lebrel de plata. Bordura del mismo metal y quince banderas.