Alcalá
Es de procedencia aragonesa, dato confirmado dado que en numerosas crónicas se habla de ello, y de los Ricoshombres que fueron tronco de la familia. Su origen es geográfico dado que fue en la villa de Alcalá del Obispo, en Huesca donde tuvieron su primitivo solar lo que hace presumir que fue de dicha población, de donde tomaron el apellido. Ya en el año 1.137, durante el reinado del rey Ramiro II, se hace mención de un caballero llamado Galín Jiménez de Alcalá quien, al parecer, fue muy notable por los servicios prestados a su soberano. El nombre sería el de Galín Jiménez, a lo que se añadiría su procedencia, y así, con posterioridad, el nombre geográfico quedó incorporado como apellido del noble citado. Años más tarde y ya en tiempos de la reina de Aragón, Petronila, hija del anterior rey y esposa del Conde de Cataluña, Ramón, (hacia los años 1.160) se hicieron notar otros dos caballeros del apellido Alcalá, Odón de Alcalá y Pedro de Alcalá. Muchos debieron ser los servicios prestados a la Corona dado que fueron colmados de honores, sobre todo el último, Pedro de Alcalá que adquiriera gran notoriedad durante el reinado de Alfonso II de Aragón, hasta el punto que fue designado por el propio monarca para asistir a las Cortes que se celebraron en Zaragoza a comienzos de su reinado. Un hijo del anterior, Gullén de Alcalá siguió las huellas de su padre en cuanto a hidalguía se refiere, llegando a ser Señor de Quinto.
ARMAS:
En campo de oro una faja de sable.
No existe la menor duda del origen aragonés, pero al extenderse por el resto de España, uno de los primeros lugares donde se estableció una rama del linaje, fue en la villa de Madrid. Uno de los doce primeros Regidores que nombró el rey Alfonso XI para la gobernación de Madrid, allá por los años 1.334, fue un caballero llamado Vicente Pérez de Alcalá. Afianzándose en lo anterior, del arraigo que el apellido Alcalá tuvo en Madrid, basta decir que numerosos caballeros de este apellido figuraron en los patrones de hijosdalgo de la citada villa.