Arrieta
Apellido vasco, sumamente extendido por toda Vizcaya y Guipúzcoa, lugares donde estuvieron establecidas diversas casas solares, por ejemplo, en Cobandiano, San Pedro de Dima y Basturia. No obstante, el apellido pasó a las provincias limítrofes y se extendió luego por la Península aunque, naturalmente en muchísima menor cuantía que en el País Vasco.
Este linaje aparece en la «Recopilación de las Casas Nobles de Vizcaya» por el Rey de Armas don Francisco Gómez de Arévalo, por fray Francisco Lozano, en su «Nobleza General de España», por don Miguel de Salazar y por don Diego de Soto y Aguilar. En los «Sumarios de Blasones» de López de Vadillo, en la «Biblioteca Alfabética» de don Francisco Zazo, en el «Libro de Armería»; el «Minutario» de don Juan Justo Aguirre y en el «Nobiliario General» de don Juan Felix de Rújula. Todos los autores anteriormente citados coinciden al atribuir el apellido a la jurisdicción de Guernica.
El escudo primitivo de esta familia estaba constituido por el segundo cuartel parlante, por significar «arrieta» en lengua vasca, pedregal o abundancia de piedras. La cruz floreteada la adoptaron por su asistencia a la batalla de las Navas de Tolosa, emblema que adoptaron los caballeros de este linaje que participaron en el citado encuentro bélico. Que el apellido Arrieta es muy antiguo lo demuestra el hecho de que ya en el año 1.284, Sancho González de Arrieta, concurrió a la incorporación de Orduña al Senorío de Vizcaya. También en Guipúzcoa su existencia fue casi simultánea, ya que en 1.399 ya existían casas solares Arrieta en Gainza y en 1.461, en la villa de Oñate. En el año 1.448, Pedro de Arrieta fue uno de los que concurrió al ataque de Mondragón.
Hay que hacer constar que en Navarra también existió una importante rama de los Arrieta procedente del solar vizcaíno de Líbano de Arrieta y su nobleza fue certificada por los oportunos Tribunales de la época.
ARMAS:
Escudo partido: 1º en gules, una cruz floreteada de oro; 2º en sinople, cinco piedras de plata puestas en sotuer.